LA NARRACION:POSIBILIDADES DE LA CONCIENCIA.

El recurso narrativo permite jugar con las escenas acartonadas que nos presenta la historia oficial o de Bronce, desarrollar la imaginación o imaginar lo impensable, bajar a los héroes muertos de sus pedestales y tener una postura mas holgada de algún hecho. El alumno identifica su personaje como de sus iguales, rodeado de circunstancias en su contexto se olvida de una lucha entre los “buenos ” y “malos” y al recrearlo en su mente es capaz ya de sentir… de sentir su historia, de vivirla y entonces se alcanza el tan anhelado y deseado objetivo educativo: “despertar su conciencia”. Pero alcanzarlo es solo el principio de todo un proceso que no termina solo en el aula, se convierte en un valor que lo va acompañar el resto de su vida. ¡Maestros! escribamos, narremos, creemos nuestras propias obras y compartamos con nuestros alumnos el viaje de vivir y sentir la Historia.


LA LENGUA DE CORTES.

Era una mañana tibia, la brisa movía las hojas de los árboles que parecían apuntalar el prodigio de aquella joven, hermosa y altiva, tan bonita como inteligente, aunque para ellos, los blancos, fuera considerada como una esclava mas. Cuidadosa de sus deberes domésticos pronto se supo comunicar con los camaradas de Hernán Cortes. No tenía familia, fue robada muy joven como consecuencia de tiempos de guerra. Según contaba que sus padres poseían riqueza, allá en Xalixco y quizá por los vagos recuerdos que tenía de tiempos de abundancia en que fue criada con refinamiento en el fondo aspiraba nuevamente a tener una vida de importancia.
Disfrazada de indiferencia pronto dejaría el anonimato que de su habla se oiría. El falso dios Quetzalcoatl la tomo como objeto, como “lengua”. Aquella especie de soldadera remota, cuyo grupo de mujeres acompañan a sus hombres a la guerra, a una guerra de conquista, había dejado de cocinar, lavar, enmendar para fungir como secretaria, embajadora, intérprete, amante…
-¿Qué decíos india?, ¿Dónde encontráis al que por fuerza los ha tenido y esta lleno de oro?, Malinalli o Malintzin , que era su nombre indígena, por que cabe aclarar su diversidad de nombres según el momento que se presentase, después de bautizada fue Marina. Esta levanto la mirada y la clavo en los ojos claros de aquel blanco, apuesto, todo lleno de bello en su cara y le dijo con un castellano cortado y pausado -pasando montaña, en línea del sol al ocultarse, tlatoani Moctezuma te tienen como algo grande, envía regalos y tributo a tus hombres y te recibe como tal. Las palabras de la india encendieron la cara de Cortes, se imaginaba grande, con poder a la usanza de los reyes en Europa, pero también le daba miedo depender de una india que habla por él, que dice y da ordenes como él, una interprete o faraute de su propia gente rebajándolo a un simple observador.
La Marina se mestizó, se bautizo, aparecida siempre en medio de los lideres blancos y los indios. Como una señora ejemplar para los aliados indios de Cortes y detestada por mexicas. Su imagen ya de por si llamativa aparecía con la cabeza erguida arrogante distinguida por su cabello oscuro coronado por un par de trenzas que formaban dos molotes en su cabeza.

Astuta, Malintzin cambio su papel pasivo en un acto de voluntad, sabedora de su poder lo asumió de manera discreta siempre en el centro de la comunicación.